Intercambio informativo con tres países revela el modus operandi de Marset

En las tareas de intercambio de información entre Bolivia, Paraguay, Brasil y Uruguay se recabaron datos relevantes del narcotraficante Sebastián Marset, de 32 años, quien utilizó el mismo modus operandi en Bolivia, como el lavado de dinero en compra y venta de inmuebles, organización de espectáculos y el tráfico de drogas.

Los viceministros de Defensa Social y Sustancias Controladas; de Seguridad Ciudadana; y de Régimen Interior y Policía, Jaime Mamani, Roberto Ríos y Jhonny Aguilera, respectivamente, detallaron ayer los acuerdos alcanzados con autoridades de Paraguay, Brasil y Uruguay durante la visita a esos países para fortalecer los operativos de captura del narcotraficante.

El viceministro Mamani informó que, en reunión con autoridades paraguayas, le hicieron conocer el modus operandi de Marset, quien, de acuerdo con los antecedentes, se dedicaba al tráfico ilícito de drogas, tenía un amplio esquema de lavado de activos y formaba parte, junto con su esposa, Gianina García Troche, de un bloque empresarial.

“Recibimos información de que este sujeto se dedicaba a la compra y venta de bienes inmuebles en Paraguay, compra y venta de ganado, de vehículos e inversiones en empresas legalmente constituidas en varios países; también se dedicaba a la organización de espectáculos, conciertos, eventos deportivos. Esta organización criminal además se dedicaba a la compra y financiamiento de equipos de fútbol”, dijo Mamani.

Marset compraba y auspiciaba a los equipos de fútbol, además pedía ser parte de estos.

Detalló que el pastor evangélico paraguayo José A. E. G., y todo su entorno familiar, está involucrado, ya que lo ayudaba a crear fundaciones para lavado de dinero. También estaba vinculado al narco otro pastor de nombre Javier R.

Mamani detalló que Marset tenía un modo particular de operar en cuanto al tráfico de drogas. Su estructura delictiva adoptaba tres modalidades de transporte, inicialmente una forma aérea, luego terrestre y finalmente una marítima, por la cual la sustancia controlada llegaba a países de Europa y África.

“Es importante mencionar que en nuestro país esta organización criminal utilizaba el mismo modus operandi”, dijo Mamani a la prensa.

La autoridad indicó que acorde con los registros 13 familiares directos de Marset ingresaron al territorio boliviano. Detalló cómo este sujeto, dedicado al trafico de drogas, obtuvo documentos de identidad fraguados para ingresar y permanecer en Bolivia.

Brasil

El viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, comunicó que en la reunión con autoridades de Brasil presentó la documentación brasileña con la que Marset ingresó a Bolivia, la que será objeto de análisis por parte del vecino país para verificar su autenticidad y si se vulneró su sistema.

Además solicitaron que Paraguay actualice la notificación de alerta roja, lo que ya ocurrió el miércoles, demostrando el resultado del trabajo coordinado con este país.

“Se ha aprovechado la oportunidad para que mejore la coordinación a través de los oficiales de enlace de Brasil (...) y la Policía Boliviana, que nos permita promover la cooperación directa en temas de interés común”, agregó.

Ríos indicó que se acordó que la Interpol sea el principal canal de intercambio de información sobre el narcotraficante uruguayo, ya que cuenta con datos fluidos, es formal, ágil y tiene una respuesta inmediata.

Uruguay

El viceministro Aguilera detalló que, en un encuentro con el Ministerio del Interior y el director de la Policía Nacional de Uruguay, obtuvo el historial delictivo del clan familiar. Se generó así la identificación de 11 nuevas personas vinculadas.

“Ahora mismo contamos con el historial delictivo del clan familiar primero y de la estructura criminal vinculada a Marset, generando así identificación de nuevos blancos. Once nuevas personas van a ser incluidas en la investigación policial boliviana, pues ha mantenido relación familiar, relación comercial o relación delictiva con el entorno de Marset”, detalló.

Dijo que se investiga a ciudadanos uruguayos y bolivianos en tres esferas, la primera vinculada al narcotráfico en cuanto a su producción, la segunda, su distribución, y la tercera en cuanto a las rutas, tomando en cuenta que la organización criminal tenía una estructura familiar, una estructura de trabajo en cuanto a la actividad ilícita en sí, y una estructura judicial que velaba por cerrar los procesos iniciados en su contra en su país de origen.

“Establecemos el control de recursos que estaban vinculados a la actividad delictiva, a la comunicación y seguridad que se brindaba a nivel regional, que obviamente tenía como objetivo evadir la justicia y generar influencia y miedo, pues en Uruguay también la Agencia Antidrogas y la fiscal que están encargadas de la persecución delictiva de ese sujeto habían sufrido un atentado”, indicó.

Por último señaló que la Policía Boliviana continúa con los operativos de búsqueda con más de 2.800 hombres y mujeres en todo el territorio nacional, maneja aún las hipótesis de “que se encuentra en el país, y otra que, a través de los 5 mil kilómetros que tiene de frontera nuestra nación, hubiera permeado estas fronteras rumbo al exterior, ninguna de las dos hipótesis se halla cerrada”, aclaró.

“La Policía Boliviana está encarando búsquedas en todo el territorio boliviano, no existe ninguna área que se encuentre fuera del alcance de la ley”, dijo Aguilera.

Hay la voluntad de trabajar de manera coordinada entre Estados

El viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, destacó que hay la voluntad de trabajar de manera coordinada entre los países vecinos para atrapar al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset.

Sobre la solicitud de actualizar la notificación contra el narcotraficante, Paraguay de manera inmediata respondió.

“Nos muestra la voluntad de los Estados de encarar un trabajo coordinado y esos resultados son obtenidos por las visitas que hemos hecho a los países de la región. Hemos coincidido en que este caso debe ser atendido desde la cooperación regional”, dijo la autoridad.

Realzó el trabajo que se desarrolla con las visitas a los países vecinos para coordinar y acordar un trabajo conjunto para atrapar a Marset y mantener una relación para una próxima oportunidad.

“Ellos han manifestado la voluntad de trabajar no solo en este caso, sino también en la resolución de otros que estén relacionados con los delitos transnacionales que atenten contra la seguridad de ambos Estados”, agregó Ríos.

Indicó que es un compromiso que se debe continuar, ya que fue un pedido del presidente Luis Arce, quien indicó la importancia de que la lucha contra el narcotráfico debe ser regional y no de manera individual.

“En el marco de la cooperación internacional es que el combate contra el tráfico ilícito de sustancias controladas debe abordarse desde lo regional. El compromiso entre los Estados es fundamental para combatir este tipo de delitos. En ese sentido mi persona ha estado en la ciudad de Brasilia para sostener una reunión con autoridades del Brasil”, aseveró Ríos.

El viceministro detalló que el 7 de agosto se trasladó al vecino país junto con el subcomandante de la Policía Boliviana, Gral. Augusto Russo Sandoval, con el fin de tratar la investigación respecto del narcotraficante Sebastián Marset y de los componentes de su organización criminal.

Fuente: Ahora El Pueblo - Angela Marquez