Pumas: van tras Revilla luego de detener a empresario acusado de sobreprecio

 El Ministerio Público aprehendió al representante legal de Fabros Motors, Ernesto F., acusado de sobreprecio en la compra de 61 buses PumaKatari. La Fiscalía y la Policía realizaron otro allanamiento para dar con el paradero del exalcalde Luis Revilla, quien se declaró en la clandestinidad en enero pasado.

“El representante legal de Fabros fue aprehendido en la ciudad de Santa Cruz y fue trasladado acá (a La Paz) para que preste su declaración informativa”, explicó a Página Siete Silvia Sandoval, jefa del Departamento de Lucha Contra la Corrupción de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).

El Ministerio Público -también- está tras el exalcalde Luis Revilla, tal como señaló Sandoval. “Como está en su conocimiento, se hizo un allanamiento en la ciudad de Santa Cruz (en contra de Luis Revilla) y él no se encuentra en su domicilio. Está siendo buscado por la Justicia”, dijo la uniformada.

En octubre del año pasado, una facción de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de La Paz presidida por Jesús Vera presentó una denuncia formal contra el exalcalde Luis Revilla por sobreprecio en la compra de la primera flota de buses PumaKatari. El supuesto daño económico asciende a 26 millones de bolivianos.

“Hemos logrado recolectar pruebas importantes de que cada bus, en la primera flota, tenía un costo de 60.480 dólares, pero el alcalde ha ordenado pagar 153 mil dólares. Una diferencia abismal, más del 100%”, declaró el dirigente y partidario del Movimiento Al Socialismo (MAS) en aquella oportunidad.

Exfuncionarios de la Alcaldía aclararon que esta diferencia correspondía a los montos que debían cancelar por traer los buses desde China, el pago de impuestos y otros.

La jefa del departamento de Lucha Contra la Corrupción de la Felcc aseguró que aún está por definirse el monto del sobreprecio en la adquisición de esta flota de buses. “Se mandó la información a la Contraloría General del Estado (CGE) para saber el daño económico. Está pendiente eso. En primera instancia, la adquisición sería por 60 millones de dólares, pero al tipo de cambio -porque se pagó en moneda nacional- se produjo un sobreprecio. El daño económico estaría oscilando en 26 millones de bolivianos. Eso está en proceso de investigación”, dijo.

El empresario llegó el jueves a las 22:30 a las celdas de la Felcc de La Paz desde Santa Cruz, se negó a dar su declaración informativa. Aún espera su audiencia de medidas cautelares. Un juez determinará si sigue el proceso en libertad, con detención domiciliaria o encarcelado.

Según Sandoval, el empresario fue acusado por resoluciones contrarias a la Constitución, las leyes y otros. Es el primer detenido en este proceso iniciado por el dirigente vecinal.

Persecución y clandestinidad

Desde la presentación de la denuncia penal, Luis Revilla acudió a todas las citaciones realizadas por el Ministerio Público. Cuando estos requerimientos llegaron hasta su esposa Maricruz Rivera, la exautoridad denunció que se trataría de una persecución política y se declaró -en enero pasado- en la clandestinidad.

La Fiscalía citó a Rivera como testigo en la compra de los 61 buses, sin embargo, este hecho se produjo cuando la pareja ni siquiera se conocía.

El 29 de enero pasado, Revilla informó -a través de una carta manuscrita- sobre su decisión. “Hoy me encuentro en la clandestinidad y así estaré mientras sea posible y sigamos solicitando más elementos que confirmen aún más que (Jesús) Vera quemó los buses (PumaKatari), nuestros 66 PumaKatari y hoy sólo quiere hacer desaparecer ese triste capítulo de la historia de La Paz y de nuestro país”, sostuvo.

Jesús Vera fue uno de los principales acusados en la quema de 66 buses PumaKatari en noviembre del año 2019. Este hecho delictivo fue cometido por personas que estaban en contra de la renuncia de Evo Morales a la presidencia y, como una forma de mostrar su molestia, atacaron bienes de la Alcaldía paceña.

El 5 de agosto, Vera fue condenado a tres años de cárcel por el “destrozo” de seis buses PumaKatari en el garaje de Pampahasi y se postergó para otra audiencia la lectura de los fundamentos de la condena. Fuente: Página Siete